Flavio parecía que estaba ido, solo pensaba en que podría hacer el fin de semana, su cabeza no tenia lugar para cosa alguna en este mundo…solo pensaba oníricamente.
- Tanto tiempo Flavio- una voz interrumpió el sueño de Flavio.
- “Esa voz” – pensó
- Mira donde te vengo a encontrar maldito roedor- bruscamente la voz comenzó a tomar forma.
- Gonzalo- respondió Flavio.
- Aja, por fin reaccionas, como has estado mi viejo amigo- sonriendo.
- ¿Bien y tú? ¿donde estabas?- Preguntó
- Aja, Te daría los detalles pero tendría que matarte.- Volvió a sonreír.
En esos momentos en la mente de Flavio apareció un conejito blanco, bípedo, con una matita de laurel al hombro corriendo en círculos.
- ¿que es de tu vida?- Preguntó al fin.
- Nada solo ando pensando- .
PD: Alguna vez leí que nunca debía ilusionarme
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